Este poema es el que pone punto y final al poemario titulado "Nunca prendimos París", de Pedro Flores.
TROVANDO AMOR TAN PERRO
Trovando, amor,
tan perro
que de más está el aroma
de la primavera entre su aroma.
Trovando
amor tan perro
que un ladrido incansable
ha remontado siglos e imperios
trovando amor tan,
perro lamiendo
una herida antigua.
Trovando amor tan perro
tanto tiempo, tanto delirio,
poetas,
y qué poco hemos aprendido.
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